La Casa Castilla y León en Córdoba se da
a conocer en los pueblos de la provincia.
Entre los fines de la Casa de Castilla
y León en Córdoba se encuentra el de hacerse presente en la sociedad cordobesa
y como consecuencia de ello, anualmente se programan actividades entre la que
figura la de visitar algún pueblo de la provincia, conocer sus costumbre, sus habitantes
y dar testimonio de Castilla y León en el lugar visitado.
El pasado sábado, 15 de noviembre
varios socios de la casa visitaron el bello pueblo cordobés de Zuheros, en
plena Sierra Subbética. Pueblo cuyos orígenes se remonta al Paleolítico Medio
(hace 100.000 a 35.000 años) y con una importancia excepcional en el periodo
Neolítico 6000 años a.de C., según se demuestra por los importantes yacimientos
encontrados en la Cueva de los Murciélagos. El núcleo urbano tuvo importancia
desde la época romana, posteriormente por los árabes y finalmente a partir de
su conquista por Fernando III.
La primera visita que realizamos fue
a la Cueva de Cueva de los Murciélagos. Esta cavidad se halla ubicada a cuatro kilómetros de la localidad cordobesa de Zuheros. Está declarada Bien de Interés Cultural y Monumento Natural Mixto de Andalucía, por sus valores tanto naturales, como geológicos y bióticos. Las características físicas de su recorrido la hacen una de las cuevas turísticas más singulares de España, ya que se descienden 63 metros,
se caminan 435 y hay entorno a 700 escalones (mitad de bajada y el resto de subida). En sus galerías se pueden contemplar pinturas
rupestres, restos arqueológicos, diferentes paneles explicativos y en el fondo
bellas salas de estalactitas y estalagmitas y un enterramiento fosilizado.
Tras la salida de la Cueva realizamos un paseo por sus
calles, sus barriadas mudéjares y judías, llegando hasta el Cañón de Rio Bailón,
desde donde se observa un espectacular paisaje montañoso.
Tras la comida, con degustación de sus productos
autóctonos entre los que destacan los quesos de cabra, visitamos el Museo
arqueológico donde se contempla la evolución de la población a través de los
restos hallados y el Castillo de Zuheros, en el que se diferencia claramente su
zona árabe y la parte renacentista, posterior a la reconquista.
Durante el regreso a la ciudad de Córdoba, se resaltó por
los asistentes, que estos actos propicia las relaciones
entre los castellano leoneses residentes en Córdoba.